DE ESPEJOS Y SILENCIOS
Explicar lo que me conmovió
esta exposición del artista y compositor
estas navidades no es tarea fácil.
He necesitado esperar hasta hoy
para enfrentarlo con palabras.
Con emociones lo hice allí, in situ,
desde el primer momento.
Acababa de adentrarme esa misma mañana
en un nuevo libro sobre John Cage,
tenía su Silencio metido en mi cabeza.
Llegué al museo sin saber
qué exposiciones había.
Dejándome sorprender.
Y vaya si lo hice...
nada más traspasar el atrio,
la exposición de Iges
me rompió en la cara
como una granada de aire.
Un juego de espejos dispuestos
alrededor de la sala
sobre pequeños atriles
en los que el espectador se asoma
y ve su "retrato"
sobre el espejo grabado
con frases escogidas
de las lecturas que han sedimentado
el camino del propio Iges.
Primer espejo que me encuentro:
Silencio: John Cage....
Y el corazón se me acelera
y me pierdo y me abismo
deambulando como zombi
devorando todo lo que
hay inscrito en ese decorado
extraño y fragmentario
que condensa filosofía pura
en torno a un tema
que me apasiona:
"En torno a todo espíritu profundo
va creciendo continuamente
una máscara" dice Byul Chun Hang
"Los espejos están llenos de gente"
grita Eduardo Galeano.
Este lunes abrí la semana
con reflejos
y hoy quiero cerrarla
también con ellos.
"Lo verdadero es un momento de lo falso"
afirma Guy Debord.
Gracias C3A y gracias Jose Iges,
por esta exposición,
alimento para el alma.
Regalo.
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